* UNA, DOS Y… ¡TRES! ¡COMENZAMOS!
“¿NOMÁS ONCE?”
¿Es posible que un individuo como Víctor Hugo Mercader Jurado, con 11 averiguaciones previas penales, al menos, en su contra, pueda llegar a ocupar la titularidad de la Fiscalía General del Estado de Aguascalientes?
¿Es posible que el sujeto de marras que en sus años como jefe policiaco solía extorsionar a narcotraficantes, pueda llegar a ocupar la titularidad de la Fiscalía General del Estado de Aguascalientes?
¿Es posible que el abogado toluqueño que en sus cargos de jefe policiaco fabricaba culpables a base de torturas, sea el próximo Fiscal General del Estado de Aguascalientes?
¿Es posible que Víctor Hugo Mercader Jurado, que disponía a placer de los vehículos robados pueda suceder a René Urrutia de la Vega como Fiscal General del Estado?
¿Es posible que Víctor Hugo Mercader, que pasó de perseguidor de narcotraficantes a defensor de narcotraficantes, sea el próximo Fiscal General del Estado de Aguascalientes?
¿Es posible que Víctor Hugo Mercader, de ser una “valiente” jefe policiaco, un civil lo “amenace de muerte” y llore como la Magdalena y se acobarde?
¿Qué tipo de Fiscal General sería Mercader Jurado, cuando un simple ciudadano le quita el sueño y el apetito?:
“Me quieren matar, no duermo, he perdido el apetito”.
“Cuatro pistoleros me la tienen sentenciada”.
“Se acercan a mí y me amenazan”.
“Me dicen: le manda saludos nuestro patrón”
“Está usted viviendo horas extras”.
“Pronto se va a ir al infierno, nuestro patrón no olvida”.
Con estos “miedos”, Mercader Jurado acudió a pedir la protección del entonces “Procurador de Hierro”, Felipe Muñoz Vázquez, “porque el señor Héctor Salvador León Lara me quiere matar, me dijo: ‘te va a llevar la chingada, te voy a matar’“.
Así las cosas, lleno de “pavor”, Mercader Jurado, temeroso de que León Lara matara a su “familia y a sus colaboradores”, interpuso la siguiente denuncia de hechos (transcribo):
“Desde el año 2011 conocí a mi hoy demandado, pues soy Apoderado Legal de la empresa ‘CERVEZA CORONA EN AGUASCALIENTES, S. A.’, según consta en el testimonio notarial número Nueve Mil Seiscientos Nueve, tirado ante la fe del Notario Público número 44 de los del Estado, Lic. José Andrade Ríos, empresa en la que el C. Héctor Salvador León Lara López se desempeñaba como Director de Ventas.
“El día 13 de junio de 2011, siendo las diez horas, el suscrito, en mi carácter de Apoderado Legal, me entrevisté con el C. Héctor Salvador León Lara López en las oficinas de la Dirección General de la empresa para comunicarle que mi representada tenía motivos razonables para haberle perdido la confianza y de conformidad con lo que establece la Ley, quedaba rescindida la relación laboral.
“Ante este hecho, el C. Héctor Salvador León Lara López se enfureció y me dijo que él nunca olvidaría esa ‘ofensa’ y que tarde o temprano me arrepentiría de haber arrebatado lo que él denominó como: ‘…mi empresa’… iniciaron sus amenazas, tal cual se desprende del acta notarial número 23, 211, de la misma fecha, pasada ante la fe del Notario Público número 10 de los del Estado de Aguascalientes, Lic. Miguel Acevedo Manríquez, pues la esposa de mi denunciado (o sea la hija de Julio Díaz Torre) le dijo a una empleada de la empresa “…ya lo verán después, no se la va a acabar…”.
“Mi denunciado, tiene la fijación mental de colaborar en la empresa precitada y ha llegado al grado de acudir a las oficinas de la empresa para la cual distribuimos sus productos, para hablar mal del suscrito, vanagloriándose de lo que dice ser sus ‘…éxitos profesionales y comerciales…’, llegando a decir que el suscrito no merece ser apoderado de la misma y en sus desquiciadas (sic) ideas ha manifestado su intención de que le confiera a él la distribución de los productos que mi poderdante ha distribuido durante décadas e incluso estoy enterado que para entrar a las oficinas de la empresa a la cual le distribuimos, se ha hecho pasar por representante de mi poderdante, situación que es falsa y que además causa molestias a mi representada.
“Han transcurrido dos años y mi hoy demandado sigue manifestando su disgusto hacia el suscrito, no solo verbalmente, como lo había hecho en varias ocasiones; sino que es el caso, que desde el principio del mes de noviembre me percaté de la presencia de cuatro personas en un vehículo color blanco, marca Chrysler, sin placas, que se estacionan (sic) cerca de mi despacho, en diferente horario y en diferentes días, quienes en un principio únicamente descendían de su vehículo para intimidar-me, haciendo comentarios burlones, aparentando que solamente platicaban entre ellos, sin embargo, fijaban en mí la vista burlonamente, hasta que descubrí que tienen vínculos con mi denunciado y esto lo sé, porque el día once de noviembre de 2013, siendo las once horas, a una cuadra de mi despacho observé al C. Héctor Salvador León Lara López a media calle, sin permitir el paso de vehículos, platicando con las personas del vehículo blanco; al verme se acercó a mi vehículo y me dijo: “…te va a cargar la chingada… te voy a matar…”, alcanzando a ver que el C. Héctor Salvador Lara López portaba un arma de fuego en su cintura, arma que es negra con cachas de plástico y tipo escuadra.
“Como es comprensible dicha amenazas me han afectado en lo anímico, en lo moral, en lo psicológico y hasta en lo laboral, pues a partir de esa fecha vivo con temor, procuro estacionar mi vehículo en un lugar en el que los esbirros de mi denunciado no se percaten que he llegado a mi despacho (sic), evito salir durante el tiempo en que ellos permanecen estacionados cerca de mi domicilio laboral (ubicado en Fray Servando de Segovia 201, fraccionamiento Jardines de Aguascalientes), pues cada vez que salgo me miran burlonamente, descienden rápidamente del vehículo y azotando las puertas se encaminan hacia el suscrito y han llegado a decirme: ‘…le manda saludos nuestro patrón… está usted viviendo horas extras… pronto se va a ir al inferno, nuestro patrón no olvida…’, esto ha ocurrido en mas (sic) de cinco ocasiones; dichas personas tienen el aspecto de oriundos del Distrito Federal, todos son morenos, visten normalmente playeras que usan fuera del cinturón del pantalón y asumo que esa costumbre la tienen quienes ocultan armas en la cintura.
“Físicamente mi salud se ha deteriorado, pues no duermo, he perdido el apetito, me preocupa a (sic) seguridad de mi familia y de mis compañeros de oficina (el temeroso leguleyo tiene un despacho denominado Mercader y González Campos, Abogados) y además sé perfectamente que mi denunciado posee la capacidad económica para continuar molestándome por sí mismo o a través de los esbirros a los que me refiero.
“La actitud y las conductas que ha ido desarrollando mi denunciado son cada vez más riesgosas y agresivas en perjuicio del suscrito, razón por la cual considero que es irremediable la presentación de esta denuncia para prevenir daños mayores a mi persona”.
Hasta aquí la demanda penal de Víctor Hugo Mercader Jurado, en contra de Héctor Salvador León Lara, yerno de Julio Díaz Torre, que, como se ve, no ha cumplido con su “amenaza de matarlo a él, a ningún miembro de su familia ni a ninguno de sus colaboradores”, como lo acusó.
****
Y CON ESTA ME DESPIDO…
Me dicen que Víctor Mercader Jurado no sólo tiene en su contra 11 demandas penales en el Fuero Común, sino otras más en la Procuraduría General de la República (PGR), por varios delitos.
Tampoco hay que olvidar que Mercader declaró, siendo director de la entonces Policía Judicial del Estado, que aquí en Aguascalientes se refugiaba la narcotraficante Enedina Arellano Félix, pero como la mujer no tenía orden de aprehensión alguna no le podía hacer nada.
* (Columna publicada inicialmente en el semanario hermano TRIBUNA LIBRE el pasado jueves 15).