“Se Apropian de los Bienes del Pueblo Para Tener más Poder”
Por Benny Díaz
“Hay hermanos (políticos) que en campañas se llenan la boca diciendo que van a servir al pueblo, luego vemos con tristeza que por más que se diga lo contrario, se sirven del pueblo, utilizan al pueblo porque se apropian de los bienes del pueblo para tener más poder y en verdad no les interesa la gente”, dijo en su homilía el obispo de la Diócesis de Aguascalientes, Juan Espinoza Jiménez.
Esto en alusión al Evangelio de Marcos, capítulo 9 en sus versículos del 30 al 37, en donde Jesús explica que el Hijo del hombre va a ser traicionado, asesinado y que va a resucitar al tercer día, que ocurrirá en Jerusalén, pero en el camino, sus discípulos más que reflexionar sobre lo que iba a ocurrir, iban pensando en cuál de ellos iba a ser el más importante, el que recibiría más honores.
Jesús, para ejemplificar que “no quiere fanáticos a su lado, sino personas que sepan servir a los más necesitados, a los últimos, a los olvidados, toma un niño, lo coloca en medio y lo abraza para invitarlos a descubrir realmente su mensaje y es el de estar y ayudar a los más necesitados, desprotegidos y abandonados a su suerte, y fue un niño porque en Israel los menores eran despreciados y por eso les dijo: ‘aquel que reciba a uno de ellos en mi nombre, lo hará conmigo’”.
El purpurado aterrizó esto a la actualidad y recordó “a tantos niños desprotegidos porque han asesinado a sus padres; cuando estaba en Morelia, sabía de muchas comunidades donde los papás eran ‘levantados’ y dejaban desprotegidas a las familias con cinco, seis, tres niños; también están tantos niños desplazados con sus rostros atemorizados por tener que abandonar sus hogares, los que son víctimas de explotación sexual, aquellos que tienen al servicio del crimen organizado… niños confundidos, engañados con las ideologías, por eso hago un llamado a los papás, a las mamás solteras, profesores, sacerdotes, catequistas, laicos en general a que no descuidemos a la niñez porque es el futuro de la sociedad, la esperanza de la Iglesia, necesitamos un cambio en la sociedad y hay que saber cuidar, educar, formar integralmente a las próximas generaciones y que no seamos adultos que nos quedemos en tantas preocupaciones y ocupaciones que nos olvidemos de la niñez”.
Reiteró que Jesús “no quiere fanáticos que se la pasen gritándole ¡vivas!, sino grupos de personas responsables con su proyecto de compartir y seguir anunciando sus enseñanzas, de que después de su pasión, resucitó”.
Además de no caer en lo mismo que hicieron los apóstoles, de andar pensando y discutiendo quién de ellos sería el más importante y se llevaría todos los honores, porque eso “es ambición y vanidad humana que no están dentro de las enseñanzas de Jesús de que para servir, hay que ser el último, pero hacerlo de verdad, para ayudar a los más necesitados, porque quienes se dejan llevar por aspiraciones mundanas y conveniencias no están al servicio de todos y menos del Maestro”.