Campaña de “Adopta un Camellón”, sin el Éxito Esperado
Por Benny Díaz
Mariano Esparza Ávila (Foto: Ernesto Martínez Reyes)
Camellones de todo el municipio se ven afectados debido al vandalismo y a la falta de agua, pero principalmente los que se encuentran al oriente de la ciudad, incluidos los que entregó hace poco tiempo la gobernadora Tere Jiménez Esquivel como parte de la rehabilitación del Tercer Anillo, declaró en entrevista colectiva Mariano Esparza Ávila, director de Parques y Jardines.
El funcionario resaltó que “lo que más dañan son las bombas, mallas ciclónicas y barandales que en ocasiones quedan inservibles porque los destrozan”.
Por estas afectaciones ha habido sólo tres detenciones por daños a la infraestructura urbana y las pérdidas que son cubiertas por el erario municipal. Las afectaciones se calculan “entre una bomba y daños a mallas, en 30 mil pesos”, esto nada más en este año.
Los daños “donde se ha realizado reiteradamente es en Villas de Nuestra Señora de la Asunción donde reventaron la malla porque intentaron robar una bomba y también hubo daños al registro con la que la teníamos asegurada”.
La bomba no se la pudieron llevar pero los destrozos que hicieron por el intento también deben repararse, indicó. Lo que sí es constante en todo tipo de infraestructura es el grafiti, “pero eso se da en todos lados de la ciudad”.
A los que han detenido haciendo esto en flagrancia los presentan ante justicia municipal y “el año pasado nos los llevamos a que realizaran servicio comunitario para que limpiaran y también barrieran los camellones”.
Otra situación adversa que encuentran es la falta de agua para mantener en buen estado árboles, plantas y pasto que hay, sobre todo en camellones.
“Las lluvias atípicas de diciembre, que eran de toda la noche, nos ayudaron porque se infiltra, pero con las temperaturas que han comenzado a subir ya hay plantas y pasto que están poniéndose amarillos y ahora sí, por esta temporada no podemos hacer mucho”, pero se hace un esfuerzo para regar la mayor parte posible”.
Aseguró que la campaña que se hizo para que empresarios adoptaran un camellón y se encargaran de mantenerlo en buen estado no tuvo el éxito esperado, porque no todos tienen la capacidad de estar sosteniendo el gasto que implica.
“Este año sólo hemos dado de alta a tres y debido a esto es que en algunos espacios se han encargado de colocar plantas suculentas, que son regadas una vez a la semana o incluso cada 15 días, mientras que el pasto requiere recibir agua tres veces por semana”.
Por eso en las rehabilitaciones han colocado “puro árbol y lo que nosotros llamamos malla jardinera, que permite la filtración de agua y estamos regando tres veces por semana, pero a los puros árboles”.
