Un hombre fue ejecutado, le enredaron cinta canela en el rostro, lo envolvieron en dos cobijas y lo “sembraron” en un predio del fraccionamiento Lomas del Chapulín, al oriente de la ciudad.
La víctima mortal fue identificada como Noé Santillán Morán “El Jícamas”, que contaba con 38 años.
Alrededor de las nueve de la mañana de ayer, una mujer caminaba por la finalización de las calles Las Flores y Chapín, cuando a lo lejos vio un bulto cubierto con unas cobijas.
Al acercarse, se dio cuenta que era un cadáver, por lo que llamó al servicio de emergencia 911.
Al lugar se dirigieron policías municipales de la Delegación Morelos, seguidos por socorristas de la Coordinación Municipal de Protección Civil, los cuales confirmaron, por lo que acordonaron el predio.
A los pocos minutos arribó el secretario de Seguridad Pública Municipal, Antonio Martínez Romo, además de elementos de la Unidad Especializada en Investigación de Delitos de Alto Impacto.
Posteriormente se presentaron elementos de la Dirección General de Investigación Pericial, quienes dedujeron que el cuerpo fue “sembrado”.
Al término de las diligencias del caso, los peritos trasladaron el cuerpo sin vida al Servicio Médico Forense para la necropsia de ley, sin que al cierre de esta edición se diera a conocer la causa de muerte.
En ese lugar fue identificado plenamente por sus familiares, los cuales aportaron información a las autoridades en cuanto a las actividades de “El Jícamas”, sin que se diera a conocer nada más.
