“Autoridades se Niegan a Escucharnos”
Por Benny Díaz
Sergio de Lara (Foto: Ernesto Martínez Reyes)
Sergio de Lara lleva 11 años y cuatro meses buscando a su hijo Sergio de Lara Quezada, víctima de desaparición forzada. El caso no avanza y en ocasiones algunas autoridades, como la Fiscalía General de la República (FGR), le da falsas esperanzas e incluso un hombre de apellido Nieves, a quien mantuvieron como parte de la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas Desaparecidas, “me dijo en varias ocasiones que sabía dónde se encuentra de mi hijo, no sólo a mí, a otros compañeros que también están en mi misma situación y nos tuvo por dos años así, ahora ya no está y tal parece que lo tienen en algún lado, y protegido”.
En entrevista con Página 24, el hombre, con mirada triste y rostro cansado por tanto tiempo de espera, mantiene la esperanza de dar con el paradero de su hijo, “porque no descansaré hasta dar con él”. Se solidarizó con la familia de Cynthia Nathali Delgado Hernández, porque sabe de la impotencia que se siente y con la que se vive cuando no se sabe lo que pasó con un ser querido.
Sergio de Lara padre también está seguro de que la elección para la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas Desaparecidas se debe hacer con total transparencia, y que no se va a permitir que se imponga a nadie, porque son ellos, los familiares de los desaparecidos, los que saben lo que es el trabajo de campo, el dolor que se arrastra y la impotencia ante la inacción de las autoridades.
Resaltó que, efectivamente, son los colectivos quienes deben de proponer la terna para que la gobernadora designe a quien esté al frente.
“Ya es tiempo de hacer las cosas bien, estamos cansados de promesas incumplidas, de que nos den palmaditas y nos digan qué van a hacer y no pasa nada. En Aguascalientes por supuesto que existen fosas clandestinas, aunque digan que no, las hay porque las personas no desaparecen porque sí y la prueba está que en Tres Centurias se hizo la búsqueda porque hay señalamientos de que ahí hay personas que fueron desaparecidas de manera forzada, lo que ocurrió hace más de un año fue por mi hijo, que era la principal persona que fue señalada y más se tardó en decirse, que en realizar la supuesta búsqueda y cerrar el caso”.
También dijo que de la visita que realizó Guillermo Fernández-Maldonado Castro, representante en México de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) a la entidad para reunirse con la gobernadora “no fuimos ni notificados, no supimos nada”.
Ante tanto silencio y omisión después de que se emitiera el informe Hasta Perder el Sentido, “hemos solicitado cita con la gobernadora desde las primeras semanas que rindió protesta y la respuesta es que no tiene tiempo, que tiene su agenda llena. Para nosotros, como víctimas, no hay nada: ni tiempo, atención y menos acción ante el hecho de que se cometió un delito grave contra nuestros familiares. Si de verdad es como dicen que no habrá impunidad en Aguascalientes, queremos resultados y que se actué con seriedad de parte de las autoridades”.
