“La Reconocen Otras Tres de las 40 Víctimas”

Por Benny Díaz

Fotografía relevante a la nota.

Maricela Sánchez Muñoz (Foto: Página 24)

La activista de derechos humanos, Maricela Sánchez Muñoz, pidió contrarréplica a la carta enviada por la excandidata a gobernadora del estado, Anayeli Muñoz Moreno, en donde asegura que en 2011 no fue visitadora de la entonces Comisión Estatal de Derechos Humanos ni de haber estado en la casa de arraigo.

“No estoy difamando a Anayeli Muñoz Moreno, claro que no lo va a reconocer, pero no sólo yo la vi, hay otras tres víctimas de los 40 que estamos reconocidos por ONU-DH que la identifican, entonces no nos pudimos equivocar varios”.

Sánchez Muñoz se dijo harta de que todos aquellos que en su momento fueron cercanos a Felipe de Jesús Muñoz Vázquez “todavía nos quieran seguir viendo como apestados y por no contar con recursos se crean con derecho de ningunearnos y decirnos mentirosos. Estábamos golpeados y amenazados, pero no ciegos. Y a Anayeli le digo que no vuelvo a quedarme callada y que no es ahora cuando lo estoy diciendo, para su información la incluí en lo que ocurrió en la declaración que realicé en 2020 ante la Fiscalía General de la República, en el expediente 46 de ese año, en el apartado 11, para que no batalle”.

En dicho documento, que está en poder de Página 24, se lee que Maricela declara que el 23 de octubre de 2011 llegó hasta la casa de arraigo un grupo de personas que dijeron ser visitadores de la entonces CEDH para corroborar el estado físico de los que estaban ahí en espera de “recibir más torturas o que nos llevaran al Cereso”.

Nombró a una mujer “llamada Anayeli a quien le mostré las marcas de los golpes que había recibido en varias partes del cuerpo. No creo que haya muchas personas con ese nombre, pero era ella, estoy segura, sólo hay dos diferencias: estaba más joven y un poco más ‘llenita’, ahora está demasiado delgada. Y reitero, no soy sólo yo la que la reconoce, son tres víctimas más. Por otra parte, si no era visitadora y se hizo pasar como tal, peor, porque era funcionaria del municipio y yo pertenecía a la corporación policial municipal, así que todo tiene sentido”.

La activista aseguró que si no se calló antes, menos ahora cuando ya se le reconoció como víctima por ONU-DH, aunque cree “que no será ahora, en esta administración cuando nos hagan justicia. Confiamos en que sea en la próxima, creemos en ella (Tere Jiménez Esquivel), espero no nos vaya a fallar como tantos lo han hecho”.

Las Burlas Para Intimidarla

Maricela no tiene reparo en denunciar todo lo que le hicieron en el “último tramo antes de que saliera el informe Hasta Perder el Sentido. Esa ministerio público que pusieron en Fiscalía (General del Estado), llamada Mireya, además de violentarme no hizo nada a mi favor, al contrario, y lo peor es que Jesús Figueroa contestó por escrito que era falso que me hubiera violentado cuando me revictimizó una y otra vez”.

En una de esas tantas idas y vueltas, esa ministerio público hizo que un grupo de ministeriales se colocaran cerca de ella, “al principio estaban bromeando entre ellos, pero de pronto comenzaron a decir que el torturador y a hablar de él en un intento de intimidarme con sus burlas. Claro que sentimos temor, pero es más nuestra sed de justicia porque no tenemos por qué seguir agachando la cabeza cuando somos inocentes”.

También es inverosímil que en la Fiscalía sigan trabajando tan campantes los ministeriales que en su momento “fueron los que nos pusieron las esposas, se burlaron de nosotros hasta que quisieron y nos agredieron de todas las formas”.

Sin intentar revictimizarse dijo que “una de las cosas que más me repetía Felipe de Jesús Muñoz era que me iba a ‘meter’ un tiro en la cabeza, es algo que no puedo olvidar”.

El Robo

Cuando fue detenida, los ministeriales se llevaron de su domicilio “ropa y zapatos nuevos que yo vendía, las prendas hasta tenían etiqueta. Si me hubiera dedicado a lo que dijeron no hubiera tenido necesidad de andar vendiendo cosas para completar a pagar mis gastos. También se llevaron mi laptop y la camioneta de mi hermana, era de procedencia extranjera y fueron por los documentos con mi mamá, además de dos cachorros de perros bóxer albinos que en cuanto los vieron dijeron que iban a ser para el comandante”.

De todo esto, obviamente que no puede comprobar nada porque además de que “destrozaron mi casa para llevarse todo lo que pudieron, también los documentos de la camioneta se los exigieron a mi mamá”.

Me Repararán el Daño

Maricela corroboró lo declarado por Felipe Hinojo Alonso: “Los que se dicen periodistas y que me han difamado revictimizándome volviendo a decir de lo que me acusaron y asegurando que quiénes responderán por las víctimas que dejamos, les informo que en mi caso yo no dejé ninguna, ni nadie de los que fuimos torturados. Cualquier persona con inteligencia entiende que eso no fue así. Y si me absolvieron fue porque no hice nada de lo que me acusaron e insisten, incluso me llaman “La Mary”, que es como me puso Felipe Muñoz; parece como si él les pasara el guion para que digan lo que dicen”.

Mencionó que en el libro del que también se mofaron porque aparece como activista de derechos humanos, “no lo hice yo, lo publicó ONU-DH y no asistí cuando lo presentaron porque fue en Ciudad de México y a mí me andaban acosando, por eso me buscaron un lugar seguro dónde estar”.

Atole con el Dedo

Maricela también contó que en lo más álgido de la persecución que realizaron para intimidarla, una de las agentes de investigación de ONU-DH habló con el entonces secretario general de Gobierno, Juan Manuel Flores Femat, y de inmediato la citaron para que acudiera a palacio.

“Fui junto con Mariana, una de las activistas del Observatorio de Violencia de Género, quienes me dieron acompañamiento durante esos momentos difíciles. Nos atendió el asistente del asistente del subsecretario de gobierno y nos salió con que había llamado una mujer que decía ser agente de ONU, pero que a ellos nos les constaba. Esto para que veas cómo se las gastan en este gobierno, donde no les importamos nunca”.

Después de esa respuesta, actitud apática y en momentos burlesca del funcionario de quinta, vinieron los agentes de ONU-DH a Aguascalientes y entonces sí los reconocieron como tal y fueron atendidos por Flores Femat y más rápido de lo que canta un gallo Maricela fue sacada de la casa donde vivía y era acosada día y noche.

“Por todo esto creo que en lo que resta de este sexenio no tendremos ninguna respuesta. Tuvieron tiempo suficiente para actuar y no hicieron nada, ahora todos quieren salirse de esto, pero ya es tarde. No les importamos, fuimos invisibles y se debe a que todos somos de escasos recursos y como se creen tan superiores no les interesa ni lo que nos hicieron, ni cómo seguimos ahora”.

Por eso esperan que con el cambio de gobierno las cosas cambien, porque “ya no estamos solos, lo dijeron muy claro los de ONU-DH, que van a estar al pendiente de nosotros y señalando las veces que sean necesarias hasta que nos hagan justicia”.