No a la Violencia en los Estadios
* El Otro lado del Futbol Mexicano
Por Omar Alejandro Cantero Carranza
Señores soy albirrojo
Hincha por siempre
Y vengo alentar a Rayos de Aguascalientes
Albirrojo es un sentimiento que se lleva en el corazón
Daría toda mi vida por ser campeón
Dale dale oh!!!
Sobredosis
PARA UN equipo de futbol, su afición lo es todo, y ésta se gana cuando una escuadra, cuando los jugadores logran generar una conexión con todo su público mediante entrega y el buen juego; la aceptación se convierte en simpatía, la simpatía se convierte en cariño, el cariño se convierte en pasión, un estado de fidelidad e identidad que mantiene a la afición unida en cualquier circunstancia ya que se vuelve una parte muy importante de sus vidas.
LOS HECHOS ocurridos el pasado sábado 5 de marzo en el estadio Corregidora de Querétaro, es sin duda la otra cara de la moneda, una muestra de la violencia dentro y fuera de los estadios de futbol tras la creación de las barras a finales de los años 90 en México.
RECUERDO HACE algunos años una entrevista en un canal deportivo, donde mencionaban con orgullo que el club Pachuca había innovado la forma de apoyar a los jugadores a través de la creación de la barras, copiando un modelo sudamericano, sobre todo de Argentina, aunque si no mal recuerdo los datos otorgados en ese momento mencionaba a un barrista del club Saprissa de Costa Rica como el creador de la barra de los Tuzos. Hoy los directivos del futbol mexicano les llaman “Grupos de Animación”, y se deslindan sobre el control de estas barras.
EN ARGENTINA en el lenguaje futbolero de las barras, además de generar violencia dentro y fuera de los estadios, se han constituido como pequeñas “mafias” donde existen extorsiones para los jugadores y directivos de los clubes, entre otros delitos, esto en complicidad con directivos de altos rangos; en Argentina son considerados un cáncer, aunque dicho sea de paso se trata de un cáncer engendrado en los mismos clubes que fomentan y respaldan las barras violentas, muchos de estos barristas cuentan con antecedentes penales por conductas antisociales.
EN INGLATERRA los famosos hooligans han sido parcialmente desterrados de los estadios, aunque fuera de los mismos las barras ultras siguen acompañando a los equipos a lo largo de Europa. El pasado 9 de marzo se enfrentaron en una batalla campal en Sevilla, los ultras alemanes del Eintracht Frankfurt contra los ultras ingleses del West Ham, por cierto no omito señalar que está última es considerada una de las barras más violentas de Europa.
¿RECUERDAN LA película de Hooligans, defiende a los tuyos? Salió en cines en el 2005 y refleja la violencia de los hooligans del West Ham y otros equipos de Inglaterra.
EN MÉXICO, desde una postura sociológica, las barras pueden comprender que un sujeto integrado en una multitud adquiere, por el solo hecho del número, un sentimiento de potencia invencible, merced al cual puede permitirse ceder a instintos que antes, como sujeto aislado, hubiera refrenado forzosamente.
EL HECHO de integración interviene para determinar el hecho de que dentro de una multitud, todo sentimiento y todo acto sean contagiosos, hasta el punto de que el sujeto sacrifica muy fácilmente su interés personal al interés colectivo. Un actor social.
ESTE ACTOR social construye una identidad, en el seno de una multitud activa que mediante cantos y gritos alimenta un estado particular, al estado de fascinación. Este fanatismo crea cambios de conductas.
LA PSICÓLOGA Iveth Aguilera del Centro Psicoterapéutico Psiqueli, define la conducta antisocial como: “Al conjunto de comportamientos, prácticas, o actuaciones que tienen como objetivo la perturbación del orden social o la agresión a éste”. Tradicionalmente, estos actos y comportamientos han sido categorizados como transgresiones, abusos, o delitos juzgados y sancionados tanto por la ley, como por la sociedad en general.
LAS PERSONAS con conducta antisocial pueden establecer el foco de su actuación tanto en espacios o propiedades ajenas, mediante actos de vandalismo, robos o atracos, como con la intención de perjudicar a otras personas mediante el uso de la violencia.
LA RESISTENCIA Albiazul, La Barra 51, la Adicción, los Libres y Lokos, la Perra Brava, la Rebel, la Insurgencia, la Monumental, por citar algunas, han estado involucradas en actos de violencia, rivalidades muy marcadas que van más allá de las canchas, un sentimiento regionalista mal encausado, una identidad con los colores del club que se mezcla con la conducta antisocial.
EN LO PERSONAL soy aficionado al futbol desde que tengo uso de razón, soy orgullosamente del equipo de Don Ramón, no obstante me queda claro que se trata de un deporte, de un gusto, y que no por amar unos colores se debe transgredir las reglas y leyes establecidas socialmente, LA PLAYERA DE TU EQUIPO NO TE HACE INMUNE, Y LA MASA NO TE JUSTIFICA.
ESTOS ACTOS violentos y la fecha quedarán grabados en la historia del futbol mexicano. Y deja en claro que siempre ha existido la violencia en el deporte más practicado del país. Si bien es cierto que existe una sanación para los grupos de animación de no tener acceso a las canchas, la considero una medida justa y necesaria, pero, a la vez es absurda porque las barras seguirán, los cantos se escucharán porque la afición no morirá, simplemente no debemos de caer en el error de generalizar a todas las barras, ni mucho menos estigmatizarlos como delincuentes o vagos. Sería una propuesta interesante declarar el 5 de Marzo Día Nacional de la No Violencia en los Estadios. En memoria de los fallecidos por el atentado, un recordatorio para la afición al futbol mexicano.
EN AGUASCALIENTES la Sobredosis Albirroja del Necaxa –fundada en septiembre del 2002 por los aguascalentenses al arribo de la ciudad, después de 80 años de estar en la Ciudad de México– se vio afectada por el lamentable capítulo en Querétaro. Bien recuerdo a Maradona en el 2001 en la Bombonera de Boca, cuando señaló: “el fútbol es el deporte más lindo y más sano del mundo. Porque se equivoque uno, no tiene que pagar el fútbol. Yo me equivoqué y pagué, pero la pelota no se mancha”.
LA SOBREDOSIS Albirroja del Necaxa ha compartido experiencias que los han marcado tanto dentro como fuera de las canchas. Casos difíciles como el fallecimiento de amigos y fundadores de la barra que yendo a los encuentros perdieron la vida; ha tenido viajes, juegos perdidos, juegos ganados, pero siempre alentando de amor y cariño a la playera. La barra albirroja siempre ha mostrado su carta abierta a recibir a quien demuestre ese cariño por la playera, que vaya, que se entregue los 90 minutos, que llegue a la puerta 4, que se integren a la barra, que canten, que brinquen, que se diviertan.
EN FORMA de protesta a través de un comunicado oficial, el grupo de animación de Necaxa, conocido como la “Sobredosis Albirroja”, indicó que, de ser necesario, no estarán en los juegos restantes de Necaxa en Aguascalientes ante los equipos de América, San Luis, Tigres y Chivas, esto con la finalidad de no tentar al caos en el Estadio Victoria.
PARA FINALIZAR me gustaría agregar que todos los grupos de animación saben a lo que se arriesgan en cada partido, se sabe que cada que se sale de casa se puede no regresar, se conoce perfectamente lo que conlleva tener pinta de barra y más de visitante, la violencia y el futbol siempre han ido de la mano, porque todos han defendido unos colores, un equipo, una ciudad, un estado, un escudo, una barra, un estadio, etcétera. Los actores sociales tienen esa identidad que debe ser defendida. Lo que pasó fue que los “códigos” en las barras se perdieron.