Sesquicentenario del Himno en Honor de Aguascalientes

Por Vicente Agustín Esparza Jiménez/ Centro INAH Aguascalientes

El 20 de mayo de 1867, en la en la Escuela de Niños número 1, se entonó por primera vez el “Himno en Honor de Aguascalientes”, que compuso Esteban Ávila con música de Miguel Meneses

El 20 de mayo de 1867, en la en la Escuela de Niños número 1, se entonó por primera vez el “Himno en Honor de Aguascalientes”, que compuso Esteban Ávila con música de Miguel Meneses

EL PASADO 20 de mayo se cumplieron 150 años de que por primera vez se entonó el “Himno en Honor de Aguascalientes”. El hecho pasó inadvertido para las autoridades estatales, principales encargados de recordar al pueblo las fechas, nombres y acontecimientos históricos para crear identidades, pues como la ha dicho Enrique Florescano, uno de los rasgos del Estado “es su capacidad para organizar y coordinar la actividad de extensos grupos humanos, infundiéndoles identidad y propósitos comunes”.

PARA QUÉ recordar fechas y acontecimientos históricos. Desde el siglo decimonónico el Estado utilizó las conmemoraciones y el recuerdo de fechas gloriosas para enseñar historia patria, crear una identidad nacional y legitimarse políticamente, ya que según Eric Hobsbawm, “la invención de tradiciones políticas” fue impulsada por el Estado y diferentes instituciones “con un claro cometido político”.

LA RECORDACIÓN de este acontecimiento histórico para Aguascalientes es importante para hacer memoria y evitar el olvido, dado que la historia nos sirve para comprender el presente a través del pasado. En el siglo XIX los encargados de conmemorar acontecimientos importantes para el régimen eran la Junta Patriótica, que devino en la Dirección de Acción Cívica y a las que podríamos nombrar guardianes de la memoria. Los hechos históricos de una nación requieren de “vigilancia conmemorativa” y para ello están los cronistas e historiadores, que a través de su conocimiento pueden coadyuvar al gobierno en aspectos culturales e históricos, ya sea en institutos de cultura, educativos, archivos, museos o asesorando a la autoridades en todos estos campos.

LOS DIFERENTES himnos mexicanos del siglo XIX fueron cantos a la libertad contra el enemigo político y fueron escritos por poetas y musicalizados por compositores. El himno de Aguascalientes nació al calor de la lucha contra las huestes del Segundo Imperio Mexicano. Su creador fue el político y poeta liberal Esteban Ávila y lo musicalizó el artista Miguel Meneses. El himno se escribió en los últimos días del imperio y para entonces Aguascalientes se encontraba en calma, pues desde diciembre de 1866 Jesús Gómez Portugal había tomado el poder en el estado.

EL 15 DE mayo de 1867 en Querétaro se consumó la caída del imperio de Maximiliano de Habsburgo y para solemnizar el triunfo del ejército republicano, el día 20 en la Escuela de Niños número 1 se cantó por primera vez el “Himno en Honor de Aguascalientes”. No se sabe si fue entonado por el propio Ávila o por la soprano Manuela Gómez de Pineda, integrante de la compañía de Miguel Meneses.

Himno en honor de Aguascalientes*

Si el traidor a la lid nos provoca
¡Arma al hombro a vencer o morir!
Que el rehusar si el clarín nos convoca
Es afrenta en el mundo vivir.

Cuna ilustre de Chávez y Arteaga,
Que a la patria mil héroes le das,
Ciudad bella, hermosísima maga,
Dios te otorgue el progreso y la paz.

Nunca el sol de los libres su rayo
Niegue airado a tu bóveda azul,
Ese sol esplendente de Mayo
Que a tu gloria ha prestado su luz.

Él alumbre tu senda de flores,
Él ¡oh Patria! otros triunfos te dé,
Y no logren los ciegos traidores
Nunca, nunca su luz obtener.

Del oprobio la mancha execrable
Cubra a aquel que la espada empuñó
Para hundirla a la madre adorable
Y a los viles franceses se unió.

Caiga, caiga la afrenta en su frente
Y en su nombre el eterno baldón.
Nunca, patria te muestres clemente,
Nunca a Lares** le des tu perdón.

Ciñe ¡oh patria! tus sienes divinas
Con los lauros que arranca el valor
Y al mirar del imperio las ruinas
Alza ufana tus himnos a Dios.

Ya no el peso de infames tiranos
A tus hijos pretenda oprimir,
Y tu pueblo sea un pueblo de hermanos
Donde puedan los libres vivir.

COMO SE puede leer, el himno es un canto a la libertad, al triunfo de las armas nacionales sobre las extranjeras, por eso su recordación a 150 años de su estreno es importante, dado que como lo afirma Thomas Benjamin, “fechas, discursos, símbolos y rituales trasmiten los mitos dominantes de una sociedad, los reafirman y hacen recordar sus valores e identidad histórica”.

Fuentes:

El Republicano, 13 de junio de 1867 y 20 de junio de 1867. Enrique Florescano, “Notas sobre las relaciones entre memoria y nación en la historiografía mexicana”, en Historia Mexicana, El Colegio de México, Vol. LIII, Núm. 2, Octubre-Diciembre de 2003. Eric Hobsbawm, “La producción en serie de tradiciones: Europa, 1870-1914”, en Historia Social, Fundación Instituto de Historia Social, España, No. 41, 2001. Benjamin Thomas, La Revolución Mexicana. Memoria, mito e historia, México, Taurus, 2003. Maurice Agulhon, “Política, imágenes y símbolos en la Francia Posrevolucionaria”, en Historia vagabunda, México, Instituto Mora, 1994. Jesús Gómez Serrano, “La República nace de nuevo” en Aguascalientes en la historia 1786-1920. Un pueblo en busca de identidad, Tomo 1/Vol I., Aguascalientes, Gobierno del Estado de Aguascalientes-Instituto Mora, 1988.

*Puso música a este himno el profesor C. Miguel Meneses y fue cantado por primera vez en el salón de la escuela principal el 20 del pasado, día en que se solemnizó en esta capital el triunfo obtenido en Querétaro por el ejército republicano.

**Lares es hijo de Aguascalientes por desgracia.