Por Carlos Alberto Sánchez Villegas
* El Camino de Hierro: Los Inicios del Ferrocarril en Aguascalientes (Parte 1)
Fierro negro que duerme,/ fierro negro que gime,/ por cada poro un grito de desconsolación…/ Cada máquina tiene una pupila abierta,/ para mirarme mejor. (1)
QUERIDOS LECTORES, el día de hoy presento una columna que estará dividida en varias partes, referente a uno de los temas más importantes que tenemos como estado y como tradición. Me refiero a los inicios del ferrocarril en Aguascalientes, esta entidad tiene una gran tradición ferrocarrilera que parte de sus talleres y que a lo largo de los años se ha identificado con la población por medio de los obreros ferrocarrileros y de la estación; por esta razón la intención de esta columna es que juntos profundicemos en cómo se dio el proceso de instalación de las vías férreas en el estado y de la posterior construcción de los Talleres Generales de Construcción y Reparación de Máquinas y Material Rodante de la Compañía del Ferrocarril Central Mexicano. Es hora de adentrarnos en el tema y subirnos juntos a ese vagón tan importante en la historia de Aguascalientes, que también nos ayudará a entender los procesos que se dieron en otros estados.
AL IGUAL que en el resto del país, la llegada de Porfirio Díaz a la presidencia significó un cambio en la dinámica social y económica del estado. En Aguascalientes, asumió la gubernatura Francisco Gómez Hornedo, de 1877 a 1879, quien fue sucedido, de 1879 a 1881 por Miguel Guinchard, quien renunció por razones de salud, realizándose unas elecciones extraordinarias que llevaron a la gubernatura a Rafael Arellano por primera vez, (2). En los años posteriores del Porfiriato ocuparon la primera magistratura de la entidad Alejandro Vázquez del Mercado y Carlos Sagredo.
EN EL AGUASCALIENTES del Porfiriato la figura del gobernador fue la más relevante de la política local, y aquella a la cual el Congreso hacía caso y obedecía, las decisiones más importantes se tomaban por el ejecutivo. (3) Se puede decir que de los cinco gobernadores que hubo en esta época Alejandro Vázquez del Mercado y Rafael Arellano fueron los más influyentes en la industrialización que se dio en el estado, el primero firmó en 1894 un contrato de concesión con los Guggenheim, para la instalación en el estado de la Gran Fundición, misma que también tendría bajo su control las minas más importantes de la entidad, generando más de mil empleos, impulsando decididamente la economía local; por otro lado, Arellano firmaría entre 1897 y 1899 un contrato con la Compañía del Ferrocarril Central Mexicano para el establecimiento de los Talleres Generales de Construcción y Reparación de Máquinas y Material Rodante de la misma. Ambas decisiones traerían los cambios más importantes para Aguascalientes durante el Porfiriato.
LOS PRIMEROS planes de concesiones para ferrocarril en la República, contemplaban que los empresarios y las élites locales de las entidades se hicieran cargo de los distintos permisos en todos los aspectos, sin embargo, el ferrocarril era un sector que demandaba un alto costo tanto de construcción como de operación, por lo que estos primeros planes se vinieron abajo debido a la falta de recursos de los gobiernos estatales y del miedo a invertir en algo desconocido de las élites locales, dejando la puerta abierta para la inversión extranjera en 1880. A partir de estos momentos surgen diversas compañías y concesiones que tenían capital estadounidense e inglés principalmente, de las cuales la Nacional y la Central eran las más importantes, éstas mismas fueron construyendo y tendiendo sus redes ferroviarias a lo largo del final de siglo XIX, aunque para 1890 ya estaban construidas una gran mayoría de las vías de hierro en el país.
DESDE QUE las diversas compañías comenzaron a tender sus rutas en el país, los diversos estados empezaron a tener una creciente expectativa sobre los beneficios que este medio de trasporte podría traer sobre su economía local, por lo que muchas veces se ponían en comunicación con las empresas ferroviarias para que contemplaran sus territorios en el trazado de rutas, además a la llegada del monstruo de hierro las ciudades y los estados se vestían de sus mejores galas para recibir a la innovadora tecnología.
EN AGUASCALIENTES, COMO en los demás estados, había curiosidad de la dinámica económica nueva que el ferrocarril traería. En 1883, cuando Rafael Arellano era gobernador de estado en un primer periodo (ocuparía el puesto de nueva cuenta en la década de 1890), se dieron los preparativos entre el gobierno del estado y el ayuntamiento de la ciudad para darle la bienvenida al “emisario del progreso” en su ruta del Central Mexicano; dichos planes contemplaban el embellecimiento de las calles principales, el número de policías adecuado para la seguridad del evento, y todos los gastos adicionales al mismo, esto se fue planeando desde octubre de 1883, (4) y sería en febrero de 1884 cuando en medio de fiesta y expectación la población de Aguascalientes recibió el primer tren de pasajeros.
A RAFAEL Arellano le tocó como gobernador recibir el ferrocarril en el estado, y esto es un hecho importante ya que una década después, también como gobernador llevaría las negociaciones con la Compañía del Ferrocarril Central para la instalación de sus talleres en la entidad, lo que nos habla de que esta primera experiencia con la llegada del ferrocarril al estado lo prepararía y le daría un criterio más amplio sobre los diversos beneficios que el nuevo trasporte podría traer sobre el estado.
EN LA SIGUIENTE entrega veremos la ruta que enlazaba el estado con San Luis Potosí y que a la postre sería precursora para que el Central Mexicano se interesara en Aguascalientes para la instalación de sus talleres, el camino aún continúa así que sigamos cómodos en nuestros asientos de tren hacia la siguiente estación.
Notas
1. Neruda, Pablo, Maestranza de noche, Universidad de Chile, http://www.neruda.uchile.cl/obra/obrafarewell2.html
2. Gómez Serrano, Jesús, “El siglo XIX y el Porfiriato” en Rojas, Beatriz, et. al., Breve Historia de Aguascalientes, México, Fondo de la Cultura Económica-El Colegio de México, 1994, p. 116.
3. Martínez Delgado, Gerardo, Cambio y Proyecto Urbano: Aguascalientes 1880-1914, Aguascalientes, Universidad Autónoma de Aguascalientes, 2009, p. 46.
4. Archivo General Municipal (AGMA), Fondo Histórico, caja 40, expediente, 5.
* Carlos es de origen aguascalentense, tiene gran fascinación por los libros, el café, la fotografía, y las disciplinas de las ciencias sociales, en un futuro tiene como objetivo destacar como historiador, y líder de opinión en el ámbito político y social.