Por Alfonso Morales Castorena

PARA AUMENTAR las crisis que en los últimos días ha enfrentado la sociedad, la de credibilidad de su voto razonado que no valió nada, se los compraron con dinero falsificado, la inesperada epidemia animal que acabó con la mayor parte de los hatos ganaderos, la consecuente escasez de carne de res en el mercado, la baja en la matanza de reses en el rastro municipal y rumores sobre las consecuencias mortales en los humanos “si comen de esa carne contaminada”, ayer la plaza principal fue escenario de la marcha que hiciera la Base Magisterial de Aguascalientes, Región Calvillo.

LOS PROFESORES marcharon al grito de “No a la Reforma Educativa”, “Alto a la Represión a los maestros en todo el país” y se proclamaban bajo la exigencia de que “el Gobierno abandone la intolerancia, su ley del garrote y se preste al diálogo”.

SIN LÍDER visible a la cabeza, dado que en cuanto el orador improvisado soltaba el micrófono, otro de ellos, pronto lo tomaba y continuaba hablando y aseguraba que el Gobierno Federal ha desatado una campaña de represión, tanto policiaca como a través de los serviles medios de comunicación nacional, en contra de los maestros que no estamos de acuerdo con la mal llamada Reforma Educativa, impuesta y aprobada por todos los partidos políticos.

EN OTRA parte de su perorata afirmaban: “Debemos darnos cuenta de la habilidad del Gobierno Federal y Estatal para ir desatendiendo las escuelas y poco a poco cargarles el sostenimiento y mantenimiento de las mismas a los padres de familia”.

ESE DESCONOCIDO orador citó como ejemplo de lo anterior el caso que desde hace tres años el Instituto de Educación de Aguascalientes (IEA) dejó de atender las salas de cómputo de las escuelas, responsabilizándolas de ello a los padres de familia o simplemente, dijo, a la concurrencia, “échele un vistazo a las condiciones en que se encuentra el mobiliario y los edificios escolares, donde los alumnos no tienen ni en que sentarse, donde no hay sanitarios, ni puertas, ni electricidad”.

ANTES DE pasar el micrófono a otro de los manifestantes, agregó: “Condiciones las anteriores que no son iguales a las de otros estados del país. Esto ha propiciado la unidad de los maestros para luchar junto con los padres de familia, para por lo menos tener las condiciones mínimas que les permitan a los mentores realizar medianamente su labor”.

MIENTRAS TANTO, una tercia de jóvenes estudiantes –cartel alusivo al caso– demandaban la cooperación voluntaria de los manifestantes y de varios de los asistentes a la plaza pública, para recaudar los recursos económicos necesarios a fin de sufragar el tratamiento de hemodiálisis que requiere el estudiante Enrique Rodríguez, en virtud de que en la clínica del Seguro Social asignada al servicio de la comunidad se le ha negado atención médica alguna.

LAS HERMANAS del educando enfermo nos comentaron que ignoraban el origen del padecimiento de su consanguíneo, pero que según los médicos del Seguro Social “se enfermó de insuficiencia renal por ingerir agua embotellada y comercializada en la cabecera municipal”, pero no comulgaron con esa versión “porque entonces todos los habitantes de Calvillo sufrirían el mismo padecimiento, nos lo dijo solo para salir del paso y eludir su responsabilidad profesional”, manifestaron las mujeres

NO POR ELLO dejaron de enviar un mensaje, a través de este rotativo, a todos los padres de familia que ayer festejaron su día y continuaron solicitando la cooperación económica que demandaban, a todo aquel que estuviera presente en la plaza o se cruzara en su camino.

Y EN ESA fecha especial para los jefes de familia, el sacerdote celebrante de la misa dominical se refirió al mensaje de salutación enviado por el Papa Francisco al mundo católico, bajo el título de “No te hagas viejo papá” en el que refiere que el sentido de la vejez es importantísimo, porque quien envejece ha vivido y esas vivencias se convierten en sabiduría.

ESTA CIVILIZACIÓN, se añade en el mensaje papal, seguirá adelante porque sabe respetar la sabiduría, la sabiduría de los ancianos, una civilización en la que no hay lugar para los ancianos, en la que son descartados porque crean problemas, es una sociedad que lleva consigo el virus de la muerte.

HOY EN DÍA cuando vivimos en la cultura del descarte, señala, los ancianos que en algún tiempo fueron jóvenes y que pasaron una juventud como la nuestra, no deben ser menos, al contrario, el aceptarlos tendrá que ser para nosotros una escuela de mucho aprendizaje, aprender a vivir la misma vida no lo encontramos en enciclopedias, sino en ellos mismos, nuestro papá viejo vale y vale hasta donde él ha llegado y termina su mensaje con “Felicidades a todos los papás”.