Por Itzel Alejandra Martínez Chávez
* Diferencias Ideológicas Entre Alexander Hamilton y Thomas Jefferson
MUY BUENOS días estimados lectores, es mi turno nuevamente de dirigirme a ustedes, tratando de ofrecerles una lectura que sea de su agrado e interés. El día de hoy hablaré un poco de las diferencias ideológicas entre dos políticos trascendentales en los primeros años de vida de los Estados Unidos. Fue durante el gobierno del primer presidente de esta nación, George Washington, que se pondría en práctica la política que llevaba al surgimiento del primer sistema de partidos de Estados Unidos.
“GEORGE WASHINGTON consideró que era imprescindible para el buen funcionamiento del ejecutivo la creación de Secretarías para que se encargasen de temas específicos. Así creó una Secretaría de Estado, ocupada por […] Thomas Jefferson […]; una secretaria del Tesoro desempeñada por el ardiente federalista Alexander Hamilton y una de guerra […] Henry Knox”. (1)
ASÍ FUE como Hamilton y Jefferson tendrían más conflictos, puesto sus ideologías no eran compartidas, o eso es lo que ellos creían, pues lo cierto es que muchas de las propuestas concordaban y la única diferencia que tenían era la forma de aplicarlas. Hamilton buscaba la forma de que el poder quedara entre la burguesía, y en cambio Jefferson quería una sociedad donde el pueblo fuese el que decidiera.
ALEXANDER HAMILTON (1755-1804), nació en Nevis, en las Antillas Menores, en una isla que se dedicaba al cultivo de la caña de azúcar. Fue enviado a los 13 años a Norteamérica. Tenía un amor ferviente por la eficiencia, el orden y la organización. Sería un abogado muy activo, y siempre pensó que la mejor forma de gobierno era la que tenían los ingleses.
“DEFENDIÓ UN reforzamiento de las instituciones comunes a los estados, […] fue el instigador y autor de muchos de los artículos de The Federalist. Como tal defendía valores nacionales: prosperidad, seguridad, orden y justicia”. (2)
THOMAS JEFFERSON (1743-1826), originario de Virginia, tenía una tendencia más amplia y libre con respecto a la democracia. Escribía acerca de plantas, animales, historia, política y educación. “Publicó, en 1774, su A Summary View of Rights of British America, ardorosa defensa de los derechos de las colonias, […] fue elegido por el Congreso Continental como miembro del comité que debía redactar la Declaración de Independencia”. (3)
EN CUANTO a las diferencias entre Hamilton y Jefferson, veremos que con ellas surgen los primeros partidos electorales. “Hamilton quería un gobierno federal fuerte y dirigido por un grupo selecto de aristócratas que estuvieren en condiciones de asegurar los intereses y la propiedad del pueblo”. (4) También trataba de mejorar las rentas y a su vez lograr restablecer el crédito. Haría desaparecer los déficits: “La deuda con el extranjero se pagó con el consentimiento de todos, pero cuando se redimieron íntegramente los títulos internos, brotó un clamor de protesta. Los patriotas, que al principio habían comprado títulos, los vieron convertidos en papel que no valía nada”. (5)
JEFFERSON, EN cambio, buscaba un gobierno en que pudiera haber toda la participación del pueblo; y que ellos (el pueblo) expresaran su opinión para mejorar el gobierno, esa era la principal diferencia entre Alexander Hamilton y Thomas Jefferson. Hamilton argumentaba que el “Congreso estaba autorizado por la Constitución para hacer lo que fuera necesario y apropiado para el bien nacional”. (6) Pero Jefferson respondió así: “el gobierno federal poseía sólo aquellos poderes que explícitamente le concedía la Constitución y que, por tanto, todos los demás […] estaban reservados a los estados. El lenguaje de la Constitución debía interpretarse estrictamente”. (7) Con todas las trabas y argumentos se lograría establecer, 1791 el Banco de los Estados Unidos.
EN OTROS aspectos se contrapusieron las ideas de Hamilton y Jefferson, como la rebelión del whisky, la frontera india, entre otros. Muchas fueron las ideas de ambos personajes, y más que separadas pretendían el bien común, con la excepción de cómo se aplicaban las normas. Estas diferencias ideológicas (sobre todo el tratado de Jay) causaron la división de poderes, y por tanto la creación de dos partidos políticos. Por el lado de los federalistas se encontraba Alexander Hamilton, su grupo era apoyado por Washington; y los antifederalistas (pasando a llamarse partido republicano en las elecciones de 1796), comandados por Thomas Jefferson. Este partido antifederalista no se oponía a las ideas de mejorar, sino a la forma en la que lo trataban de hacer, dejando y beneficiando sólo a las personas de clase alta.
POR TANTO se puede concluir que tanto Alexander Hamilton, como Thomas Jefferson sólo buscaban el bien y la perseverancia para los Estados Unidos. Ambos hombres tuvieron sus altas y bajas, que se veN reflejadaS en la historia de este país. Sabemos que las disputas siguieron, pero Hamilton ya no competía contra Jefferson, pero tampoco lo apoyaba. Jefferson ganando la contienda, después del gobierno de John Adams, llegaba a convertirse en el tercer presidente de Estados Unidos de América.
HASTA AQUÍ mi intervención, los invito a escuchar el programa de radio Trapitos de Clío todos los lunes en punto de las 6:30 pm en Radio UAA, o por medio de internet, radio.uaa.mx, proyecto que al igual que esta columna son colaboraciones de los alumnos de la Licenciatura en Historia de la UAA.
Notas
1. De la Guardia, Carmen, “La sociedad republicana”, en Historia de los Estados Unidos, Silex ediciones, España, 2011, p. 97.
2. Ibíd., p. 98.
3. Ibíd., p. 99.
4. Frankli Escher, Jr., Breve historia de los Estados Unidos, Editorial «Guarania», México, 1954, p. 66.
5. Ibíd., p. 67.
6. Degler, Cochran, De Santis, Historia de los Estados Unidos. La experiencia demócrata, México, Limusa. Noriega Editores, 1998, p. 116.
7. Ídem.
* Itzel Alejandra, es estudiante de la licenciatura en historia en la Universidad Autónoma de Aguascalientes, sus interés se encuentran en la historia de Japón, del arte, historia cultural, vida cotidiana. Entre sus pasatiempos además de la historia, se encuentran en leer novelas de ficción, dibujar, hacer difusión de la historia, así como tomar una buena taza de té o café y pasar tiempo con sus amistades. Una de sus aspiraciones más grandes es convertirse en escritora de textos académicos, novelas históricas y de ficción, y la elaboración de textos de historia para niños.